DE LA VIOLENCIA DE GÉNERO A UN DIVORCIO FULMINANTE

Mucha gente se preguntará que relación tienen estos dos conceptos, conceptos que son juzgados en diferentes ramas del derecho como es el caso, penal y civil. Pues existe el jeroglífico para conectar estos dos conceptos y consiste en la denuncia falsa.

Muchas mujeres, que nunca han sido agredidas ni físicamente ni psicológicamente, utilizan esta Ley para denunciar a su marido o pareja afectiva de malos tratos físicos y/o psicólogicos falsamente, para así conseguir con premura el uso del domicilio y la guarda de los menores. Quedándose los hombres desamparados tanto en la jurisdicción Penal como en la Civil, debido que todo el proceso lo haremos en los Juzgados Penales, con un Fiscal que lleva causas penales contra denunciados, que se realizan diligencias urgentes para el pago de pensiones y en general se acelera todo, y es posible que cobren una ayuda económica por el hecho de decidir que son mujeres maltratadas. En general ir por esta vía es mucho más fulminante y barato e incluso pueden gozar de medidas cautelares de protección. Todo lo contrario de lo que le pasa al hombre, que de la noche a la mañana se ve con toda su vida destruida, con una orden de alejamiento y un régimen de visitas para poder ver a sus hijos, y sin hablar de las pensiones periódicas que tendrá que realizar periódicamente a la mujer que lo ha denunciado como un maltratador.

Creo que después de tanto tiempo con esta Ley de Violencia de Género y vistas las denuncias falsas realizadas soy partidaria de que se modifique esta Ley, para que sólo las mujeres que realmente han sufrido malos tratos se les proteja de sus verdugos.